El sacerdote Numa Molina, en nombre del pueblo venezolano, rindió homenaje frente a la tumba del papa Francisco, en la Basílica Santa María la Mayor en el Vaticano, en agradecimiento por la canonización del doctor José Gregorio Hernández.
«Estamos desde la tumba del papa Francisco; el pueblo de Venezuela le da las gracias a él, lo recuerda, lo ama y desde aquí recibimos la bendición y mandamos la bendición a todo el pueblo de Venezuela», exaltó el padre Molina.
Destacó que estar en la Basílica Santa María la Mayor es una experiencia conmovedora «porque para nosotros los venezolanos venir al sepulcro de Francisco significa encontrarnos con un ser humano que nos amó profundamente; a pesar de que gente perversa hizo comentarios torcidos, sabemos muy bien que en el fondo lo que había era amor por el pueblo venezolano». Asimismo, recalcó que el papa Francisco siempre demostró su amor y «se preocupó por Venezuela».
La actividad acompañada de otros representantes de la Iglesia católica venezolana llevó una ofrenda floral al sarcófago del sumo pontífice que dio como último decreto papal antes de su fallecimiento la canonización del doctor José Gregorio Hernández.
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