El ministro de Asuntos Exteriores de la Federación de Rusia, Serguéi Lavrov, confirmó que la iniciativa de celebrar una cumbre bilateral en Budapest fue planteada por Washington. En entrevista con el canal húngaro Ultrahang, reseñada por la agencia Tass, Lavrov precisó que la realización del encuentro dependerá exclusivamente de la voluntad estadounidense.
“El presidente estadounidense Donald Trump le propuso al presidente ruso Vladimir Putin reunirse en Budapest. El presidente Putin dijo: ‘Sí, comencemos con los preparativos’”, afirmó Lavrov.
De esta manera, el canciller de la nación euroasiática subraya que Moscú respondió con disposición diplomática. Sin embargo, la contraparte norteamericana modificó su postura. “Y luego se cancela la invitación; después dijeron que cancelar significa posponer. Ya esa reunión depende de quienes iniciaron el proceso”, agregó.
El jefe de la diplomacia rusa añade que no recibió una invitación formal, pero sostuvo una conversación telefónica con el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, quien considera que no era necesario concretar una reunión presencial en este momento.
Por su parte, el presidente Vladimir Putin declaró el pasado 23 de octubre que la cumbre en Budapest fue aplazada, además de recalcar que la propuesta de realizarla en territorio húngaro provino directamente de Washington, lo que evidencia que el proceso de diálogo fue iniciado por la Casa Blanca.
Rusia mantiene su disposición al diálogo, mientras Estados Unidos impone condiciones y posterga compromisos, en un contexto internacional marcado por tensiones geopolíticas y maniobras unilaterales por la región norteamericana.
Fuente: Medios Internacionales
